Si están de viaje por Buenos Aires no pueden dejar de conocer y experimentar nuestra música rioplatense. En este post les contaremos la historia del tango, desde sus comienzos hasta nuestros días. Esperemos que les sirvan estos datos y los esperamos en nuestra ciudad arrabalera.
Qué vamos a ver en este artículo
Historia del Tango
Los comienzos del tango se remontan alrededor del año 1870, en los arrabales de Buenos Aires. Es allí donde surge como una mezcla de diversas danzas y canciones de muy diverso origen.
Los gauchos, desplazados del campo, trajeron a Buenos Aires sus payadas, y las pulperías del campo se convirtieron en milongas al llegar al Río de la Plata. La milonga es una danza muy popular bailada por los compadritos y se la considera la antepasada más cercana.
Por otro lado, los marineros cubanos trajeron la habanera, un baile lento en ritmo 2×4.
A todo esto hay que sumarle la contribución de los negros y sus candombes.
Fue así como nació El Tango. Pero fue la introducción de un instrumento nuevo, el bandoneón, inventado en Hamburgo por un tal Band e introducido en Buenos Aires por un marinero alemán, lo que iba a transformar radicalmente el Tango. De esta forma, la música alegre y ruidosa, surgida de los candombes negros, poco a poco se vuelve melancólica
Origen de la palabra Tango
La palabra Tango es de origen africano y quiere decir lugar de reunión. A finales del Siglo XVIII los negros descendientes de los esclavos llaman tango a los lugares donde se reúnen para hacer música y bailar.
Del arrabal a la clase media
Los primer
os tangos se empezaron a tocar en varios lugares a la vez, interpretados por músicos que iban de un burdel a otro. Pero no pasó mucho tiempo hasta que se empezó a bailar en los patios de los conventillos.
El tango de los comienzos del siglo aún no se ha convertido en una queja desesperada, es una música alegre y canalla. El tango cantado, cuyas palabras proclaman la traición de una mujer y la soledad de un hombre abandonado, aparecerá más tarde, con Mi noche triste, de Pascual Contursi.
El Tango se hace internacional
El tango hace furor en las pistas de baile de París en los años 1913 y 1914. Posiblemente haya sido llevado por los jóvenes de clase media que aprendieron a bailarlo en los arrabales. Otros afirman que fueron los marinos de la Fragata Sarmiento en el curso de un viaje de instrucción que introdujeron las partituras en Francia.
Lo cierto es que este baile exótico que las parejas bailan juntas, es inmediatamente adoptado por los parisinos. Son ellos quienes lo convierten en una moda avasalladora.
Su expansión definitiva
Después del éxito en París, el tango vuelve a la Argentina. Es así como las orquestas típicas se mudan del burdel al cabaret del centro. En las salas del “biógrafo”, como se llamaba al cine, las orquestas acompañan a los films mudos.
La burguesía se acerca a los cabarets importantes. Pero a diferencia de la Belle Epoque, donde los placeres estaban reservados para los hombres, las mujeres de buena sociedad se atreven a rozar este mundo.
La expansión de este baile se debe tanto a su consagración en París, y que el cine mudo difunde a través de Rodolfo Valentino y Carlos Gardel, como a la transformación de la obscenidad del burdel en drama personal que conmueve la sensibilidad popular
El Tango hoy
El tango se baila hoy en todo el mundo, desde Japón hasta Buenos Aires.
El 11 de diciembre, fecha del nacimiento de Carlos Gardel se lo ha declarado Día Nacional del Tango.
Actualmente se lo baila en muchas milongas y academias, en su mayoría ubicadas en el barrio porteño de San Telmo. Su fervor se expande a los jóvenes. Ellos día a día se suman a sus clases y se animan con este baile tan propio de Buenos Aires.
El Tango y el turismo en Buenos Aires
Debido a la fama internacional que hoy tiene esta danza, muchos turistas se acercan a Buenos Aires entusiasmados con conocer esta música. Además, no son pocos los que se animan a dar unos pasos en las milongas o hasta tomar clases profesionales de tango.
En el barrio de San Telmo, uno de los más bohemios de Buenos Aires, se encuentran la mayoría de las milongas. Son salones donde podrán tomar una clase o simplemente pasar un buen momento mirando la pista de baile.
En Buenos Aires la oferta de milongas es tan amplia que todos los días de la semana siempre hay alguna abierta. Estos lugares se van turnando para que aquellos fanáticos que lo deseen, puedan recorrer el circuito de milongas durante toda la semana.
Si prefieren ir a disfrutar de un show profesional de tango, existen numerosos teatros por el Centro porteño. Además del show de tango, suelen estar acompañados con algún cantante o muestra de danzas folclóricas argentinas.
Esperemos que les haya resultado interesante la historia del Tango.
Los esperamos en Buenos Aires con este maravilloso y sensual baile.
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